Te aspiro en la espera interminable del hilo tendido frente a mí,
inánida presencia,
triángulos perdidos,
ruido ingobernable que cabalga hacia mis furias sedientas,
mientras los abalorios de arena se entierran en tu boca.
Te aspiro en la espera interminable del hilo tendido frente a mí,
inánida presencia,
triángulos perdidos,
ruido ingobernable que cabalga hacia mis furias sedientas,
mientras los abalorios de arena se entierran en tu boca.
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