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Mostrando las entradas de 2018

Feminisma

Derrumbaremos aquellos muros feminicidas de nuestras voces, nuestras ideas, nuestras cuerpas, nuestras vidas. Haremos de las calles nuestra antorcha y con ella arderemos hasta arrasar con el patriarcado, los rosarios que iluminan sus capitales y esa (su) burguesía (que aunque se vista de friendly , burguesía se queda). Jamás un "gracias" para un milico, ni para una mujer blanca que genera plusvalía de manos y cuerpas morenas. Jamás un perdón para cualquier hombre que no destruya los machos que le gobiernan (y carcomen el corazón). Hacia la femisma y, por favor, mucho más allá... 

Ternura (en tiempos de la acumulación por desposesión)

1 Cuentan que las palabras están encadenadas al fracaso más grande todos: al olvido (de cómo desenvainar una pluma) y al resquebrajamiento de sus alas, tan lastimadas por las desilusiones de toda utopía, esqueleto del futuro, mapa en perpetuo trazo y camino hacia salidas laberínticas. Pero en las heridas buscamos la furia y, como violentas fenix, emergemos de ellas. De esas cenizas haremos el funeral de la capa de ozono, Será la última hoguera del mundo. 2 Y allí, en el puerto de lo que habrá sido la existencia, podré (porque aún algo se podrá) mirar las llamas en tus ojos, tiernas lagunas nocturnas de lucha y de la lucha por la ternura. Sin ellas y tus suaves palmas, toda revolución se condena a sí misma.

Silencios al beber un té de manzanilla

1. No Fingir que (no) existes (no) hará que dejes de existir. Es una lástima extrañarte; me hubiera encantado (no) conocerte... 2. Ideal Así, sólo (rechazarte) el té; (ignorar) tu mirada y pasar (de largo). pero, bueno, cariño, nada es (ideal). 3. Voz Qué bonita sería la vida sin ti y, sobre todo, sin tu eco.

Alebrije triste

Alebrije triste, amas sin mirarte; sin reparar en tu península de heridas y sin saber que el mundo es más que tus alitas rotas. Alebrije triste, solo y solitario, estrellado contra el fondo del mar y enterrado bajo la arena; solo querías hacer un castillo. Alebrije triste, perdido y empolvado ¿Cómo cultivar tus áridos vacíos y tus penas viejas cuando tus lágrimas (sombras peregrinas) no dejan de ahogarte? Alebrije triste, apagado y mutilado, ya viene el vuelo de los vuelos; hallarás turquesas y flores bajo las piedras.

Las nubes

Puedo vislumbrar el cielo entre el movimiento de tus dedos y la vibración de las cuerdas; siento la sal del mar, me visto con su espuma y convierto al sargazo en mi corona [Entonces, la arena y el agua desdibujan mi cara]; siento el ardor del volcán, su lava catapulta mi alma,                                           hecha de fragmentos confundidos del pasado                                           y del presente escurrido en los sueños del porvenir.